6 sitios turísticos en ciudad de Panamá que muchos desconocen

La ciudad de Panamá, pequeña pero sorprendente, es un lugar lleno de contrastes. La ciudad de caracteriza por contar con ruinas coloniales y mansiones restauradas que conviven pacíficamente en un horizonte marcado por rascacielos. Existe una plétora de paisajes y actividades para mantener entretenidos a aquellos en busca de mucha diversión. Además, para los turistas a los que les gusta salir de los circuitos habituales, existen joyas escondidas, circuitos inusuales y algunos secretos poco conocidos. Sus vacaciones pueden ser más que especiales si toma alguno de estos consejos de recorridos no tan turísticos:

1. Compuertas de Miraflores y una gran sorpresa:

El Canal de Panamá es una de las atracciones imperdibles de Panamá, por un buen motivo. Desde el Centro de Información Turística de Miraflores de la ciudad de Panamá puede observar las compuertas del canal, que son gigantes e impresionantes. También cuenta con un pequeño museo y una tienda de regalos, como es de esperarse. Pero después de que el centro cierra sus puertas a las 5 p.m., cae la noche y el canal se convierte en un fenómeno apenas iluminado. ¿Quiere echarle un vistazo? No hace falta ingresar a la fuerza... Solo diríjase al nuevo restaurante que reabrió sus puertas en el último piso del edificio. Este restaurante, que ofrece primeros planos de la famosa vía marítima, es el mejor lugar para obtener fotografías nocturnas excepcionales del Canal de Panamá.

2. El Country Store & Café de Ancón:

El Cerro Ancón es uno de los paisajes más emblemáticos de Panamá. Una gran bandera panameña flamea en la cima y se presentan distintos paseos para cualquier persona interesada en realizar una excursión corta. Si desea dejar atrás a los turistas con sus cámaras fotográficas, simplemente diríjase al Country Store & Café, frente a la impresionante fachada de la Iglesia Unión de Balboa. Lo que parece ser una linda y pequeña tienda por fuera además es un atractivo bar y restaurante por dentro. Encontrará cerveza artesanal de oferta (consulte por las grandes marcas de la Casa Bruja de Panamá y un menú simple y sabroso. Los fines de semana, las actividades varían desde escuchar música en vivo hasta degustar parrilladas especiales. Los dueños también venden productos orgánicos y artículos de ferias comerciales...¡como cigarros elaborados a mano!

3. Un lugar oculto en Casco Viejo:

Las plazas señoriales de Casco Viejo se erigen como testimonio del pasado colonial panameño. Es un muy buen sitio para visitar y conocer edificios históricos, desde monumentos hasta iglesias y mucho más. Además, la zona ofrece una variedad de casas de comida y bares repletos de lugareños de la alta sociedad y visitantes amantes de la cerveza. Es un sitio con mucha vibra, pero si le interesa destapar los secretos del Casco, diríjase al edificio conocido como la Casa del Soldado. El edifico alberga el Centro Cultural de España y suele ofrecer exhibiciones. Lo que muy poca gente sabe, sin embargo, es que también cuenta con un bar en la azotea que ofrece, obviamente, tapas españolas. Para presenciar uno de los mejores paisajes del Casco y rodearse de gente ecléctica e interesante, la terraza de la Casa del Soldado es el lugar ideal.

4. Un bosque tropical en el Parque Metropolitano:

Los visitantes suelen querer contar con más tiempo para explorar Panamá. Este país es famoso no solo por sus playas e islas, sino también porque alberga extensas zonas de selvas autóctonas. Pero no hace falta que se aleje de la ciudad de Panamá para ver el follaje tropical. Bien dentro de los límites de la ciudad, el Parque Metropolitano es una joya que en ocasiones pasa desapercibida. El parque selvático completo, escondido en la punta oeste de la capital, es inmenso, ya que cuenta con más de 2630 km2.

Este inmenso bosque tropical alberga dos senderos principales, un mirador que ofrece una vista amplia a la ciudad y del Canal de Panamá y una increíble variedad de especies. Podrá ver monos, osos hormigueros, iguanas, osos perezosos y otras 250 especies de aves, muchas de las cuales son especies exóticas y coloridas. Súbase a las grúas de acceso del Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales para observar el dosel del bosque. ¡Es una experiencia inolvidable!

5. Centro Natural Punta Culebra:

La mayoría de los turistas que visitan la Calzada de Amador se dirigen directamente al biomuseo diseñado por Frank Gehry. Aunque la fachada colorida y alucinante y las exhibiciones modernas y lustrosas del museo son muy atractivas, existe otro paisaje que vale la pena conocer a solo metros del lugar. Si está conduciendo, es posible que pase por alto el pequeño cartel que indica la dirección al Centro Natural Punta Culebra.

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La visita a este centro es la mejor elección si viaja con niños, ya que cuenta con exhibiciones interactivas muy divertidas. Se pueden estudiar las familias de aves y osos perezosos bien de cerca, sostener una estrella de mar o un erizo en las manos y mirar fijamente al pez de ojos saltones que quizás nunca antes vio, salvo que haya hecho scuba diving. Punta Culebra, un sitio más pequeño y más sustentable que las grandes atracciones al estilo “mundo marino”, permite que los niños (y los padres) tengan contacto personal y bien de cerca con el lado más húmedo de la naturaleza.

6. Uno de los pocos Templos de Bahá’i en el mundo:

¿Busca un poco de paz y tranquilidad? Le contamos un secreto muy bien guardado: el templo de cúpula ovalada en el Cerro Sonsonate de la ciudad de Panamá es uno de los ocho únicos templos de Bahá’i en el mundo entero. Este templo, diseñado para parecerse a una planta de loto, suele ser reconocido por aquellos que lo visitan como un centro de energía. No se puede negar que durante la “temporada verde” (de abril a diciembre), la vista desde este paraíso en la cima del cerro es espectacular. En este templo no se ofrecen eventos o sermones a modo de bienvenida. El templo de Bahá’i, sin museo o tienda comercial, está abierto a cualquier visitante en busca de un poco de meditación tranquila.